¿Qué es el peeling químico?
En términos simples el peeling químico es un tratamiento en el cual se usa el ácido para eliminar las capas externas de la piel. El ácido penetra en la capa superficial de la piel (epidermis) para refrescar y producir una rápida exfoliación, o en la capa más profunda de la piel (dermis) para lograr corregir los problemas de la piel. Esos pueden ser los poros abiertos, el daño solar, la textura desigual, las líneas finas y la laxitud.
¿Cuáles son los diferentes tipos de los peelings químicos?
El ácido glicólico, salicílico y mandélico son los más utilizados de este grupo. Estos normalmente lograrán un peeling superficial o solamente la exfoliación. Los peelings de ácido frutal necesitan ser neutralizados, por lo tanto, la aplicación incorrecta puede causar un daño significativo en la piel. Los peelings de ácido salicílico son el tratamiento útil para el acné activo, especialmente en los pechos y espalda. La recuperación suele ser de uno a dos días.
El ácido tricloroacético es la base de este tipo de peeling y puede ser utilizado como la exfoliación superficial o el peeling de profundidad media. De esta manera se puede obtener una óptima mejoría en las cicatrices, pero también se puede generar una piel más firme y lisa. La recuperación dura entre 7 y 10 días.
Idealmente la piel debería estar preparada por lo menos 6 semanas antes del procedimiento. Una piel saludable se regenerara de mejor manera que una piel dañada. Por lo tanto, una piel preparada reaccionara de mejor manera al peeling.
El motivo principal por hacer el peeling en la piel es disminuir y revertir los efectos del daño solar. En segundo lugar, la piel que se regenera después del peeling profundo será más delicada que la piel que tenías anteriormente. Si quisieras beneficiarte a largo plazo con peeling de la piel, deberías protegerte del daño solar continuo. Al fin y al cabo, siempre te asegurarías de que tu bebé o niño se pongan el protector solar y que eviten la exposición solar.
